Existen muchas maneras de comunicarse con un ser querido, una carta, un telegrama, un e-mail, una visita etc. El Señor nos muestra una manera sencilla para que estemos conectados con su presencia, en el evangelio Jesús nos muestra la oración simbólica que reúne todos los requisitos para saber que estamos siendo escuchados; la oración del Padre Nuestro, de principio a fin esta oración nos muestra tres cosas, que creemos en Dios (que le alabamos y le amamos) luego que estamos concientes de su poder y magnificencia y por último que nos sometemos a su voluntad.
El Padre Nuestro es la oración que Jesús nos enseñó en el sermón del monte, nos la dio como una manera de ejemplo para que toda oración que realizamos al Padre lleve esas características, ciertamente que cuando dialogamos con Dios de todo corazón le estamos abriendo la puerta a que Él nos pueda ayudar y aconsejar, es necesario que la oración lleve la eficacia de la FE ya que como Jesús mismo nos dijo, sin FE es imposible agradar a Dios.
La oración es el camino más sencillo para llegar al Señor, la manera más dulce de nombrarlo y la forma más poderosa de situarnos bajo su dulce mirada. No dudemos jamás dirigirle una oración sincera y dicha mas que con los labios con el alma entera!